Este post sobre el doctor maligno estaba esperando que llegase el momento apropiado para su presentación en el blog como integrante de la plantilla, pero hemos tenido que adelantarlo debido a unas declaraciones subidas de tono en el vestuario tras un entrenamiento.
Primeramente haremos un somero perfil del pollo en cuestión:
Dr. Maligno (Manolo). Nº 5. Base, o algo por el estilo. Su estilo se ve marcado por la irregularidad, tan pronto es un base rápido que la bota, que tira, que pasa, como se ve sumido en la vorágine de la zona y su altura es el hándicap principal.. Su facilidad para los idiomas se hace patente en samil dónde se entiende a la perfección con toda clase de inmigrantes africanos (literal), estibadores portuarios y demás calaña que se dicen ser jugadores de basket: su truco es el lenguaje de signos: él se convierte en el marcador “digital” de cualquier partido y esto le hace ser el punto de atención en la cancha.
Su habilidad manual le ha hecho famosos y se ha inventado una serie de entradas a canasta de modo inverosímil que hacen que sean una especie de torbellino que va dando vueltas en el aire hasta que deja el balón de espaldas a canasta con un leve giro de muñecas (sí, las dos), y el balón hace un efecto de “folha seca”, toca la azotea del tablero y sutilmente besa la red. Impresionante Malign, claro con tus poderes cualquiera. Su pasado como avesporro le ha jugado malas pasadas “tiene ciertos lapsus liguae” que el comité disciplinario tendrá que analizar:
Literalmente “ si los jedys bajais a segunda no conteis conmigo”.
Según el reglamento jedy interestelar – galactico – de disciplina deportiva – nocturna, en la primera parte, disposición primera, artículo primero: punto a, primer párrafo:
“la disciplina jedy nos obliga a actuar como conjunto haciendo las victorias y las derrotas hechos comunes al conjunto del grupo”. (hala!!!)
Teniendo en cuenta la atenuante de que el citado dr. Maligno viene siempre a jugar , sea la hora que sea (aunque a veces parezca un mini-yo) el comité falla que deberá estirarse e invitar a unas cervecitas, para redimirse, si posible después de una victoria, que saben mejor.
Por cierto, de nuestro ultimo partido mejor ni hablar, parafraseando al gran Obi Wan Willy:
nada que decir "fatal en defensa y fatal en ataque". El zapatillas, que suscribe esto no quiso ni saber el resultado final..........
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